Esta nueva tecnología está basada en plomo y comparte algunas características con las tradicionales baterías VRLA, aunque incorpora interesantes mejoras.
Las baterías Lead-Crystal están compuestas por placas de plomo y un ácido líquido SiO2 como electrolito que sustituye al ácido sulfúrico de la batería de plomo ácido tradicional. Durante las primeras cargas, el electrolito reacciona con las placas de plomo formando con ellas una estructura cristalina y compacta, de ahí su nombre. Es una tecnología no tóxica, que facilita el intercambio de iones y evita la pérdida de humedad, la sulfatación de las placas y la pérdida de materiales.
Es una batería hermética, que no requiere mantenimiento. No está clasificada como peligrosa y no es explosiva. Provoca una reacción combinada que impide la fuga de hidrógeno y oxígeno y no hay derrames, por lo que se puede montar en cualquier posición excepto boca abajo.
Los ciclos de carga y descarga de una batería Lead-Crystal son muchos más comparados con una batería de plomo ácido o gel, las cuales permiten entre 300 y 400 ciclos, mientras que el Lead-Crystal permite entre 2000 y 3100 ciclos. Esto multiplica su vida y puede llegar a usarse hasta 18 ó 20 años, reduciendo la necesidad de mantenimientos programados para cambiar las baterías.
Otra característica mejorada del Lead-Crystal es su ratio de autodescarga, extremadamente baja, por lo que permite su almacenamiento sin uso hasta 2 años, y aún así estaría al 80% de su capacidad nominal. De todas formas a este nivel de descarga puede cargarse sin problemas. De nuevo la necesidad de mantenimientos por recargas periódicas durante almacenamientos prolongados se reduce.
Las baterías de Lead-Crystal trabajan entre –40º C y +65º C. Esta propiedad es mucho mejor que en las baterías tradicionales de plomo, sobretodo a bajas temperaturas.
Intrínseco de su tecnología cristal es el no contener líquidos ni producir gases de ningún tipo por lo que una batería Lead-Crystal es estanca. Tampoco es corrosiva, por esto no tiene ninguna limitación a la hora de transportarla ni siquiera por avión. Esta propiedad reduce los costes y tiempos de transporte, así como de homologación para nuevos proyectos.
En comparación a una batería de plomo convencional y gracias a su composición química particular tiene además las siguientes ventajas:
- Mejores propiedades de carga y descarga gracias a su capacidad de absorber una mayor cantidad de corriente en menos tiempo. Esto reduce los tiempos de carga un 20%.
- Superior capacidad del almacenamiento de energía.
- Posibilidad de descargar el 100% de su capacidad nominal sin dañar la batería. Se puede volver a cargar otra vez hasta el 100% de su capacidad nominal (en solo dos ciclos de carga y descarga).
-Su uso es idóneo tanto para aplicaciones estacionarias como cíclicas, cubriendo las necesidades de los distintos mercados indústriales, solar, energía eólica, etc.
En la siguiente tabla puede comprobar el listado de baterías disponibles, y acceder a las especificaciones técnicas de cada batería:
-Su uso es idóneo tanto para aplicaciones estacionarias como cíclicas, cubriendo las necesidades de los distintos mercados indústriales, solar, energía eólica, etc.
En la siguiente tabla puede comprobar el listado de baterías disponibles, y acceder a las especificaciones técnicas de cada batería:
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